El transporte de las materias primas que se han generado a un lado y otro de Sierra Morena Oriental siempre ha sido un desafio y su traslado, ya en épocas romanas, hacia la zona del Guadalquivir para de ahí llevarlo hasta el mar, era complejo. Por ello en los principios del Siglo XX constituye un gran adelanto la construcción de la vía estrecha entre Horcajo(Ciudad Real) y Conquista (Córdoba). La vía estrecha del AVE no ha sido la primera que ha atravesado nuestras sierras, otras fueron las que lo iniciaron.
Son muchas las muestras que quedan de esta obra que evitaron los penoso transporte del plomo, plata, cinabrio, etc a lomos de caballerías por estrechos pasos que comunicaban el Valle de Alcudia con el de Los Pedroches. Pero desgraciadamente van desapareciendo por la acción incontrolada de los dueños de las distintas fincas que atraviesan estas antiguas vías.
En algunos lugares apenas son visibles, entre encinas y monte, los restos de la plataforma que sustentaban los railes sobre los que se desplazaban los vagones cargados de mineral.
Tuneles, puentes, caminos estrechos entre montañas, son vestigios pasados de una fuente de ingresos que suposo para toda la zona un despegue sin igual en toda su historia, no en vano aparecieron poblaciones con miles de habitantes que trabajaban directa o indirectamente en las explotaciones mineras.
Horcajo es el lugar donde más población había y desgraciadamente vemos como día a día languidece entre el olvido de la administración y la presión de fincas cinegéticas que tiene alrededor.
La estación de La Garganta es otro lugar que podría ser aprovechado para lugar de descanso de la impresionante ruta que sería recorrer desde el Valle de los Pedroches hasta Puertollano por un carril cilcoturista por estas antiguas vías. Un proyecto que revitalizaría la zona de cara a un turismo rural totalmente abandonado a su suerte y que podría generar muchos beneficios a una zona con un potencial natural extraordinario.
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