Sierra Morena y Sierra Madrona son lugares ideales para visionar a un pequeño corvido de unos 30 cms y vistosos colores y prominente cola. Son ruidosos como pocos y tienen un comportamiento social muy gregario, llegando a formar bandos de más de 100 individuos.
Tienen una estructura muy cerrada y existe un intenso reconocimiento individual. En nuestros paseos camperos es frecuente verlos como se desplazan de un sitio a otro reclamando abundantemente para no perder el contacto entre ellos.
Esta forma de vida es la que le da ese toque de "pandilleros del bosque" y la mejor manera de corroborarlo es poner un pequeño cebo de pan en cualquier zona donde habitualmente pasan para buscar comida, en este caso es un área recreativa, y esperar a que aparezcan.
Los primeros en llegar son los pequeños paseriformes pero en el momento en que aparecen estos "latin king" desaparece cualquier forma de vida alternativa. Ellos mandan y ellos se reparten, jerarquicamente, la comida.
Y el que quiera comer antes que ellos que vaya formando una pandilla más grande y numerosa... de momento son los que mandan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario