Cada primer domingo del mes de mayo se celebra en Azuel la romería de la Virgen del Romero que es llevada a un paraje entre encinas, jaras y unas vistas maravillosas. Valga esta entrada como homenaje a toda esa buena gente de esta preciosa tierra que nos acogió hace ya unos años y que nos está permitiendo conocer unos parajes que nunca hubiésemos imaginado.
Sobre las 10 de la mañana, de la pequeña iglesia de nuestro pueblo, sale la imagen de la Virgen del Romero acompañada por los azuelenses que peregrinan durante breves kilómetros hasta la finca "El Castillo" donde se encuentra un área acotada para dicha celebración.
La romería es una oportunidad de reunión para los que todavía tienen la suerte de vivir en Azuel y para los que en su día emigraron y aprovechan todos los años el puente de mayo para acudir a ver a familiares y conciudadanos.
La imagen es portada a hombros por todos y todas los que se ofrecen a llevarla hasta un pequeño altar que se ha construido al efecto y en el que se celebra una misa.
A partir de ahí cada familia ha improvisado y acondicionado su lugar particular donde degustar las viandas y bebidas a la sombra de las encinas. Es ahí donde cada uno ofrece lo que tiene a todo el que se acerca.
Como no podía ser de otra forma esta fiesta y el lugar donde se celebra, como todo lo que rodea esta tierra siempre depara una sorpresa y ella ha sido las inmensas vistas que se tienen desde el cerro donde se finaliza la peregrinación. Son 360º de vistas de la inmensidad de Sierra Morena Oriental y Valle de los Pedroches. Un motivo más para acudir a la romería y un motivo más, y van millones de ellos, para engancharse como estamos literalmente enganchados a estas tierras y a estas gentes humildes, hospitalarias y trabajadoras.
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